Este itinerario transcurre por el tramo alto del río Vinalopó. En esta región donde el agua ha sido el rasgo diferenciador, podemos encontrar un paisaje muy particular caracterizado por la existencia de ecosistemas de ribera y cultivos con necesidades de agua mayores (avellanos, pequeñas huertas) que los estrictamente de secano (olivos, almendros), además de otros elementos relacionados con el aprovechamiento del agua, como los sistemas de riego de numerosas balsas, canales, presas y molinos asociados a antiguas fábricas.
El itinerario comienza en el mismo Centre d’Información del Parc Natural, en el Mas d’Ull de Canals. Saliendo de la masía, seguiremos la pista forestal que aparece a nuestra izquierda y que nos conducirá prácticamente al final del itinerario. A escasos 500 metros del inicio cruzaremos el Barranc d’Ull de Canalns, donde limitan los términos municipales de Banyeres de Mariola y Bocairent.
Continuando por la pista encontraremos a la izquierda una serie de bancales de olivos y almendros, y numerosas casitas repartidas por la zona conocida como l’Ansarí. A la derecha, la vegetación está dominada por pinos y matorral; a nuestras espaldas vamos dejando el Mas d’Ull de Canals y elevándose al fondo, la Penya la Blasca. Ante nosotros, cada vez resultan más visibles los restos del castillo del Vinalopó, construido en la cima de una solitaria colina, y mientras caminamos podemos contemplar los efectos del devastador incendio acaecido en el año 94 sobre las cumbres de los alrededores. Siguiendo los bancales, ahora de avellanos, la presencia no demasiado lejana de chopos (Populus nigra) ocupando una franja lateral, nos indica la localización del lecho del río que, a tramos, parece literalmente excavado en el fondo del valle, hacia el que nos acercaremos cada vez más.
Recorridos unos 2’5 kilómetros desde el inicio, llegaremos a las proximidades de La Borrera o Molí de la Campana (punto 1), con la chimenea que ya de lejos podíamos atisbar. En sus inicios, en el año 1.712, la edificación fue concebida como molino de harina; más tarde, en el año 1.810, se reconvirtió a molino papelero, y finalmente, entre los años 1.855 y 1.968, se transformó al sector textil. Constituía un verdadero complejo fabril, con hasta tres molinos papeleros (el más conocido el de la Campana, famoso por su papel de fumar, uno de harina, además de la hilatura). La pista continua paralela al río, decorado con el bosque de ribera constituido por chopos sobretodo, pero también por álamos (Populus alba), sauces (Salix sp), zarzas (Rubus ulmifolius), juncos, y otras especies, custodiadas por el vuelo de oropendolas (Oriolus oriolus), ruiseñores comunes (Luscinia megarhynchos), autillos (Othus scops), carboneros comunes (Parus major), mitos (Aegithalos caudatus), ruiseñores bastardos (Cettia cetti), petirrojos (Erithacus rubecula), y otras pequeñas aves que alegran, con sus llamativos colores y cantos, nuestro caminar.
Continuamos unos 300 m aguas arriba hasta llegar al conjunto de la Fàbrica de Blanes (punto 2), también conocidas como el Molí de Baix y el Molí de Dalt. Las primeras edificaciones, nacidas como molinos de harina, datan de finales del s. XVIII. Desde principios del XIX y hasta 1.942, su destino fue la industria papelera.
Para continuar el itinerario cruzaremos el río y seguiremos una senda que discurre por el interior del bosque de ribera, hábitat de una importante fauna de la que no será difícil encontrar algún ejemplar de las especies más comunes, como puede ser la rana verde (Rana perezzi) o la culebra viperina (Natrix maura). Por esta orilla del río atraviesa la antigua acequia que conducía las aguas hacia los numerosos molinos y balsas que prosperaron a orillas del río. No tardaremos en cruzar de nuevo el río para llegar, escoltados por carrascas, sauces y algunas trepadoras, a la Font de la Coveta (punto 3). Se trata de una cavidad de unos 2 m de altura situada en un recoveco a la derecha del camino; muy cerca, un medidor de caudal, que antaño se usaba para comprobar el nivel de las aguas y regularlas en función de las existencias y necesidades.
Existe una cierta controversia en cuanto a la ubicación exacta del río Vinalopó. Tradicionalmente se ha venido considerando la Font de la Coveta como tal, si bien es cierto que el agua provendría de Els Brulls, o incluso de una zona más arriba, en las proximidades del Mas de Bodí. Lo que sí es cierto es que, es en este manantial donde el agua brota a la superficie de forma permanente, creando así un verdadero río de vida. Las aguas continúan su camino, y el cauce recorrerá sus comarcas en busca de la ciudad de Elche, y desaparece antes de llegar al mar. Son un total de 92 km de escaso caudal, ya que el río se ha empleado desde antiguo para mover los engranajes de las fábricas textiles y papeleras que tanto abundan a lo largo de su curso, y también en los cultivos de regadío que existen en sus riberas.
Para regresar, nos dirigiremos directamente por la pista forestal hacia las fábricas. Rechazando cualquier bifurcación que encontremos tanto a izquierda como a derecha, llegaremos de nuevo a las inmediaciones del Mas d’Ull de Canals.
Notas: no está permitido el acceso con vehiculo motorizado por pistas forestales sin autorización expressa; no está permitido el baño en el área de protección integral del nacimiento del río Vinalopó.